La distancia nos lleva a otro rumbos, caminos distintos que no tienen vuelta hacia atrás. El tiempo, aliado enemigo que cambia el destino, congela las ganas de amar. Se han quedado en la luna los tiernos abrazos, se ha llevado la noche lo que fuimos una vez tu y yo. Mírame, mírate, como hemos cambiado. Mírame, mírate, ahora nada es igual. Mírame, mírate, ya no te siento a mi lado. Mírame, mírate, no podemos volver hacia atrás